Por una palma sostenible en Ecuador
Quito, 03 de diciembre de 2018.- Varias fueron las expectativas con las cuales los miembros del Comité Interinstitucional de Seguimiento de la Palma Sostenible (CISPS) se reunieron por cuarta ocasión, desde su creación en 2018: retomar la dinámica para cristalizar la sostenibilidad en toda la cadena, establecer metas y roles para la planificación de los próximos meses, consensuar acciones e identificar el camino para posicionar a Ecuador como un referente en la producción sostenible de palma.
Luego de dos días de trabajo intenso, con un grupo diverso que incluyó a los sectores gubernamental, privado y de la sociedad civil, se marcó un hito con la definición de un plan estratégico para el comité.
El CISPS es el ente responsable de liderar y promover propuestas para el fortalecimiento de la producción y la mejora productiva de la palma sostenible en Ecuador, con un enfoque climático. Su objetivo es que el país pueda competir en el mercado internacional, con altos estándares sociales y ambientales.
En la reunión efectuada en Puembo, para desarrollar su plan de acción, se analizaron cuatro líneas estratégicas de trabajo: gobernanza, productividad y competitividad, socioambiental y posicionamiento
En el tema de gobernanza, el comité se planteó el posicionamiento de la institucionalidad del CISPS, el fortalecimiento de las capacidades de los miembros de la plataforma para el desarrollo sostenible del sector, el diseño y el seguimiento a las políticas y estrategias para la construcción de un modelo de gobernanza para la producción de palma sostenible bajo estándares internacionales y el fortalecimiento asociativo de pequeños productores y de la institucionalidad gremial de la cadena.
En cuanto a la competitividad y sostenibilidad, una acción concisa será la obtención de la certificación jurisdiccional de palma sostenible, lo cual implica la realización de estudios de altos valores de conservación, cambio de uso de suelo y normativa para el licenciamiento ambiental de los palmeros.
Adicionalmente, se planteó mejorar las capacidades técnicas de los productores en certificación y trabajar en un modelo de producción sostenible, que permita al palmicultor mejorar la productividad y la rentabilidad de los productos amazónicos, con miras a replicar esto en el resto del país.
Con respecto al posicionamiento, se consideró fundamental incidir a nivel multisectorial para que se reconozca la importancia del sector de la palma sostenible en la economía ecuatoriana y su potencial como generador de empleo, divisas y desarrollo de poblaciones menos favorecidas. También, la importancia de informar al mundo sobre el compromiso y los resultados obtenidos por el país en la reducción de la deforestación y la voluntad del sector palmicultor de realizar una producción libre de deforestación.
En el eje socioambiental se estableció la necesidad de que las autoridades ambiental y agraria trabajen coordinadamente y en comunicación con los miembros del CISPS para definir lineamientos claros de una política de desarrollo sostenible del sector, que contemple un crecimiento productivo sin que esto ponga en riesgo a los bosques con altos stocks de carbono, las áreas de altos valores de conservación y los paisajes de uso múltiple.
Por su parte, PROAmazonía impulsará la certificación jurisdiccional de RSPO para toda la región, lo cual constituirá el primer paso para demostrar que la producción de palma en el Ecuador sigue los lineamientos internacionales de sostenibilidad.
Los integrantes del CISPS manifestaron su deseo de que esta plataforma de diálogo intersectorial se posicione como un referente de gobernanza que pueda ser un ejemplo para el desarrollo de otras cadenas productivas del país. El reto más importante en 2019 será la ejecución de este plan.