El Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias (INIAP) con el fin de entregar una nueva variedad de tomate de árbol resistente a la antracnosis u “ojo de pollo”, realiza ensayos e  investiga la enfermedad, en zonas productoras de este cultivo,  en la provincia de Tungurahua, con buenos resultados.

La investigación se inició con 50 accesiones o aprobaciones  y luego de varias evaluaciones se  trabaja con 10 materiales que mostraron tener las características deseadas en cuanto a resistencia a esta enfermedad.

De estos materiales saldrá la nueva variedad adaptada a las condiciones de producción de la zona.

Las evaluaciones se realizan en las fincas de los productores. Aníbal Martínez, encargado del Programa de Fruticultura de la Zona Central, explicó que en Pelileo, existen 800 plantas que se evalúan, para que en el próximo año, luego de la validación respectiva, se obtenga la nueva variedad.

La antracnosis se produce por hongos y cuando no se aplican medidas de control, las pérdidas son totales. Todas las variedades cultivadas en nuestro país  son susceptibles al ataque de esta enfermedad.

Cuando las lluvias son frecuentes y la humedad relativa es alta, la enfermedad aumenta su incidencia y severidad, lo que hace difícil su control.

De allí la importancia de la investigación que realiza el INIAP, para obtener una  variedad con resistencia a esta enfermedad, con buenos rendimientos, de buen tamaño de fruto y que tenga aceptación por parte del productor y consumidor.

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